jueves, 9 de septiembre de 2010

:::Miedo Nocturno:::

Puede que este sea el relato mas corto de todo mi libro, pero la razon es que no quiero contar un cuento, sino solo transmitirles a todos ustedes una vivencia que tuve una noche de invierno, casualmente la noche mas larga de todo el año.

Todo comenzo en la tarde del veintiuno de junio, yo estaba peleado con mis hermanos razon por la cual no nos hablabamos. La cena transcurrio en un silencio que me aturdia, solo se escuchaba el sonido de los gatos en nuestra terraza.
Luego de ver el programa de TV que generalmente vemos de nueve a once, mi padre nos mando a dormir.
Yo, como todas las noches, subi la escalera que da a mi cuarto, luego de buscar un par de cosas me dirigi al baño para asearme.
Cuando termine, me dispuse a dirigirme a mi habitacion la cual ya se encontraba con la luz apagada, yo intui que mis hermanos lo habian hecho a proposito para llevarme la contra.
Mi madre charlaba con mi padre y mi abuela en la planta baja de la casa, el pasillo se encontraba a oscuras. Yo, que tengo fobia a la oscuridad, cerre fuerte mis ojos y me dirigi a toda velocidad hacia mi cama, la cual esta practicamente en la entrada de mi cuarto. Al llegar alli, hoy que mis hermanos roncaban de una manera muy sobreactuada, yo no le di importancia, simulando no haberme percatado de aquel hecho.
Ya en mi cama me dispuse a acostarme, mis padres subian para hacer lo mismo. Me sorprendio la rapidez con que mis padres se acostaron y se durmieron. Yo me encontraba "tieso" en la cama ya que cuando mis padres se duermen antes que yo, a mi me cuesta mucho hacerlo.
Los minutos pasaron, y luego de orar comenzo a llegar el sueño, comenzaron a pesar mas y mas mis parpados, me parecia sentir una brisa helada que pasaba por mi cara justo un segundo antes de lograr conciliar el sueño lo cual consigui inmediatamente despues de este ultimo acontecimiento.
Estaba soñando con algo muy bello para mi cuando me desperte de repente, en medio de la densa oscuridad de la noche saque una caja de debajo de mi cama en la que se encontraba un reloj digital que saque para fijarme la hora forzando mucho la vista debido a las circunstancias en las que me encontraba, el reloj marcaba las tres treinta y cinco de la madrugada. Yo esta solo en la noche, con frio. La ventana de mi pieza se encontraba abierta, yo pense que podria haber sido mi mama que la habia abierto ya que horas antes hacia un calor realmente veraniego.
Me di vuelta boca arriba ya que estaba muy incomodo, me encontraba viendo la parte de arriba de la cucheta en la que dormia, no se sentia ningun ruido, el frio era tremendo pero yo no reaccionaba para ir a cerrar la ventana.
Habre estado una hora despierto, haciendo memoria sobre cosas olvidadas durante el dia que habia transcurrido, en realidad por mi cabeza bailaba un mundo totalmente nuevo, lleno de cosas que iban y venir, aparecian y desaparecian y provocaban a todos mis sentidos y se robaban toda mi atencion. Me sente en la cama dispuesto a sacar de debajo de mi cama nuevamente la caja en donde tambien se encontraban cartas de mis amigas que me dieron ganas de leer.
Estaba sentado en mi cama y la luz de la luna entraba hacia mi pieza acompañada de aquel frio que cada vez se hacia mas intenso o al menos eso sentia yo, me puse un pullover que se encontraba al pie de mi cama y comence a leer una de las cartas que tenia.
Me fije en el reloj, eran las cuatro como por una orden, dada por un poderoso e invisible ser, imposible de rechazar mire hacia la ventana. En contraste con la pared blanca de la casa que se encontraba frente a la mia y que se lograba ver desde donde me encontraba, se encontraba una silueta humana, muy pequeña y con un aura violeta que rodeaba toda su oscura figura, la mire aterrorizado durante unos segundos durante los cuales estuve absolutamente inmovilizado, tratando de moverme inutilmente.
A mi parecer habrian pasado unos cinco minutos cuando aquella figura comenzo a movers igual que como lo hace una sombra, pegada a la pared, la calle y luego al suelo de mi habitacion, asi llego hasta mis pies y yo seguia alli, aun inmovil cuando llego hasta mi pecho y senti que me quedaba sin aire. Luego de esto, senti en mi hombro un gran empujon que me tiro hacia atras, me golpee la cabeza contra la pared y me desmaye.
Al dia siguiente me desperte sin acordarme de nada.
Unos dias despues comence a recordar todo lo sucedido, todo era muy confuso, no sabia si todo aquello habia sido un sueño o algo real. Me estaba bañando cuando me avive de fijarme en mi hombro, cuando al fin lo hice ahi estaba, un gran moreton negro ocupaba gran parte de mi hombro derecho, lugar en donde esa cosa me habia golpeado, aun me dolia al tocarlo.
Como era de esperar, nadie me creyo cuando conte esta experiencia, de lo que si estoy seguro es que este hecho marco un antes y un despues en mi vida, antes era esceptico a todo eso y ahora ya no lo soy mas aunque nunca supe que fue aquello y nunca le encontre una explicacion.

Esto me paso, no importa si no creen, tomenlo como un simple y resumido relato. Pero acuerdense de todo esto que hoy les cuento todos los veintiuno de junio ya me a mi ya me ha sucedido dos veces. Por ultimo te hago una pregunta ¿Por que no te puede pasar a vos?

Este relato forma parte del libro que escribi hace ya mas o menos cinco años, tengo los derechos de autor de este cuento como de todos los que conforman mi libro asi que por favor no lo copien. Todavia no lo edite pero se llama HISTORIAS DE LA MENTE, cuando lo vean en las librerias comprenlo.

Los veo la proxima...bye!

P.D=Perdon por no empezar con un hola! o algo por el estilo como siempre pero pense que se me cortaba el ambiente si lo hacia.
P.D2=Si esta historia les gusto veo si en algun momento, si estoy convencido y realmente tengo ganas, cuelgo alguno de mis otros relatos.

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